domingo, 31 de julio de 2011

Honradez: ¡Más vale que me crean!

Al revelar los Diez Mandamientos, el Señor declaró: “No hurtarás. No hablarás contra tu prójimo falso testimonio”. El Artículo de Fe número trece de la Iglesia declara: “Creemos en ser honrados”. Ser honrado significa ser sincero, veraz y sin engaño en todo momento.
Hermanos, todos debemos estar preocupados acerca de la sociedad en que vivimos, una sociedad que podría considerarse como un Armagedón moral. Me preocupa el efecto que puede tener sobre nosotros, que somos los poseedores del sacerdocio de Dios. Hay tanta gente en el mundo que parece no distinguir el bien del mal o no importarle lo que es bueno o malo. Todos conocemos el decimotercer Artículo de Fe, el cual deseo destacar: “Creemos en ser honrados, verídicos, castos, benevolentes, virtuosos y en hacer el bien a todos los hombres; en verdad, podemos decir que seguimos la admonición de Pablo: Todo lo creemos, todo lo esperamos; hemos sufrido muchas cosas, y esperamos poder sufrir todas las cosas. Si hay algo virtuoso, o bello, o de buena reputación, o digno de alabanza, a esto aspiramos”.
Es necesario que todos sepamos lo que significa ser honrados. La honradez es mucho mas que no mentir. Significa decir la verdad, hablar la verdad, vivir la verdad y amar la verdad. John, un niño suizo de 9 años que formaba parte de una de las compañías de carros de mano, es un verdadero ejemplo de honradez. Su padre había puesto en el carro de mano cierta cantidad de carne de bisonte y dijo que había que guardarla para la cena del domingo. John expresó: “Mientras empujaba el carro de mano, tenía tanta hambre y aquella carne olía tan bien que no pude resistir mas. Yo llevaba una pequeña navaja de bolsillo … y aunque sólo podía esperar que mi padre me castigara con severidad cuando se enterara, todos los días cortaba pequeños trozos de ella. Los masticaba durante tanto tiempo que se iban poniendo de color blanco hasta no llegar a tener gusto alguno. Cuando mi padre fue a buscar la carne, me preguntó si yo habla estado cortando algo de ella. Yo le respondí que sí, que había tenido tanta hambre que no pude resistir la tentación. En lugar de regañarme o castigarme, mi padre se alejó con lágrimas en sus ojos”’.
Deseo hablarles con franqueza acerca de la honradez. La honradez es una brújula de la moral para guiarnos en la vida. Ustedes, los jóvenes, se hallan bajo una gran presión para aprender acerca de la tecnología que tan rápidamente se esta expandiendo en el mundo. Sin embargo, esa formidable exigencia de sobresalir en el conocimiento intelectual suele desorientar a la gente en cuanto a lo que es mas importante: la honradez y la integridad.
Hacer trampas en la escuela es una manera de engañarse a s mismo. A la escuela vamos para aprender y nos engañamos a nosotros mismos cuando nos aprovechamos de los esfuerzos y de los conocimientos de los demás.



Hermanos, se que el Señor continuara bendiciéndonos si seguimos siendo honrados, fieles y leales a nosotros mismos y a esta gran causa. El progreso de esta obra es un testimonio de su verdad; aun así, cada uno de nosotros puede obtener su propio testimonio personal por medio del don del Espíritu. Yo poseo ese testimonio, el cual inunda lo mas profundo de mi alma. Que el Señor nos bendiga al proseguir en esta sagrada causa, ruego en el nombre de Jesucristo. Amén.

ARTICULO COMPLETO http://lds.org/general-conference/1996/10/honesty-a-moral-compass?lang=spa

Cuida tus pasos


"La compasión de los amigos que viven las enseñanzas de Cristo influye profundamente en nuestra vida y la cambia. Debemos recordar que el Señor a menudo envía "bendiciones de lo alto, por medio de las palabras y los actos de las personas que aman". El amor es la esencia del Evangelio de Jesucristo. En esta Iglesia, muchas veces las oraciones en las que se pide ayuda el Señor las contesta por medio del simple servicio diario de hermanos y hermanas que se preocupan por los demás. En la bondad de los amigos genuinos, he visto reflejada la bondad del Señor mismo. Siempre me he sentido humilde al reconocer que el Salvador nos considera a todos Sus amigos cuando decidimos seguirlo y guardar Sus mandamientos."(Elder Joseph B. Wirthlin, Liahona enero 1998, págs. 37,38)

miércoles, 13 de julio de 2011

LA IMPORTANCIA DE LOS TEMPLOS

"Todo templo que esta Iglesia ha edificado se ha erigido, en efecto, como un monumento a nuestra creencia en la inmortalidad del alma humana, de manera que esta fase de la vida terrenal a través de la cual pasamos forma parte de un ascenso continuo, por así decirlo, y que tan ciertamente como hay vida aquí, habrá vida allí. Ésa es nuestra firme creencia; procede de la expiación del Salvador, y el templo se convierte, tal como lo he indicado, en el puente de esta vida a la venidera.

El templo tiene que ver con las cosas de la inmortalidad. No tendríamos que edificar templos para celebrar matrimonios si no creyéramos en la eternidad de la familia. Los construimos para que la familia pueda ser eterna. Todas las ordenanzas que se realizan en la Casa del Senior se convierten en expresiones de nuestra creencia en esa doctrina básica y fundamental. Por tanto, el templo se convierte en el elemento definitivo de nuestro sistema de adoración y, por ende, tiene gran importancia y significado para nosotros."

NO SE CONVIERTAN EN UN ESLABÓN DÉBIL


"Ustedes son parte del gran proceso de Dios por el cual han pasado los hombres y las mujeres que se han ido antes que ustedes. Todo lo que son, tanto física como mentalmente, será transmitido a través de ustedes a las generaciones venideras; por lo que es tan importante, tan eternamente importante, mis hermanos y hermanas, que no se conviertan en un eslabón débil en la cadena de sus generaciones"